Es muy importante que al comprar o vender una propiedad lea el contrato por completo ya que contiene todos los términos relacionados con la transacción que pronto concretará.
Hay muchas cuestiones que debe considerar. Si el precio negociado es bueno pero las condiciones del contrato no lo son, pregúntese a sí mismo qué tanto quiere comprar o vender la casa y a qué costo.
Algunos de los puntos más relevantes son:
- Fecha de cierre y de toma de posesión: Si está comprando una casa, el contrato provee que la fecha de posesión será el mismo día y a la misma hora del cierre, u otra hora o día acordado por las partes. Tenga esta fecha/hora en mente al dar aviso adonde renta o al vender otra casa. Si está vendiendo una casa, debe saber que para este día/hora debe haberse mudado por completo de la propiedad. Y si como vendedor, a la vez está comprando otra casa, debe tener en cuenta la venta de la primera al acordar el cierre de su nueva casa.
- Fechas límites para la inspección, tasación y financiación: El contrato típico provee al comprador con una cantidad de días acordada para realizar todo tipo de evaluaciones que considere necesarias y para obtener financiación. Por lo general los compradores buscan que estos plazos sean lo más largo posibles para tener tiempo suficiente. Por su parte, los vendedores buscan acortar estos plazos.
- Condición de la propiedad: En una transacción típica, el vendedor entrega al comprador un informe acerca de la condición de la propiedad. El comprador podrá utilizar este informe como punto de partida en la negociación del precio y/o las reparaciones.
- Reparaciones: Como resultado de la inspección, y en una situación típica, el comprador pedirá que el vendedor repare todos o algunos de los problemas hallados por el inspector. Tenga en cuenta que las inspecciones son para descubrir temas estructurales, pero el vendedor no está obligado a hacer estas reparaciones.
- Garantía: Finalmente, el vendedor podrá ofrecerle al comprador una garantía (home warranty), que funciona a manera de seguro limitado sobre los sistemas principales de la propiedad, o el comprador podrá adquirirla por él mismo. Por lo general, estas garantías duran un año y tienen opción a ser renovadas.
Por éstas y otras razones es tan importante leer el contrato, a pesar que está repleto de terminología legal y de que puede parecer complicado. Tómese su tiempo y hágale a su agente de bienes raíces todas las preguntas necesarias.