El verdadero costo del seguro de vivienda

 

 

Usted compra un seguro de vivienda esperando nunca tener que usarlo. Y luego algo ocurre. No es una pérdida grave – tal vez un animalito hizo un agujero en su techo, o tal vez chocó la puerta de su garaje. Se le cruza por la cabeza poner un reclamo con su compañía de seguro para que respondan por el episodio – después de todo usted pagó la póliza a tiempo todos estos años. Pero poner reclamos tiene sus consecuencias.

No haga reclamos por pérdidas menores. Si le costará poco dinero solucionarlo, lo más probable es que le convenga más pagarlo de su bolsillo en vez de poner un reclamo. Después de poner un reclamo con su compañía de seguro, la tarifa anual aumentará en promedio 9%, o $150 al año. En algunos estados, el aumento puede llegar a ser del 21%, mientras que en otros, es menor.

El estado en el que vive juega un rol esencial al momento de decidir si poner un reclamo y cuáles serán las consecuencias financieras. Un ejemplo es Minnesota, adonde el aumento podría alcanzar el 21%.

Los seguros son regulados a nivel estatal y las variaciones se deben a la ocurrencia de desastres naturales. Además las compañías de seguros saben que el riesgo es mayor en zonas de desastres naturales y cobran más por sus pólizas en estados que sufren huracanes, inundaciones, tornados y terremotos.

No es justo que aumenten las pólizas por un solo reclamo, pero es la realidad. Por eso debemos considerar que tan grave es el daño a la propiedad antes de poner un reclamo. Si la pérdida apenas supera el deducible, será preferible pagar por esas reparaciones de su bolsillo y no poner reclamo. Lo sé, es ridículo e injusto. La mayoría de nosotros hemos aprendido esto por las malas.

Otra recomendación, elija el deducible más alto que pueda pagar. No solo pagará menos de seguro, sino que también le ayudará a resistir la tentación de poner un reclamo por algo no tan importante.